CDMX.- El exgobernador de Puebla, Mario Marín Torres, acusado de tortura contra la periodista Lydia Cacho, continuará preso en el penal del Altiplano, porque una jueza de Distrito de Quintana Roo le negó llevar su proceso en libertad por el riesgo de que se evada de la justicia.
Marín Torres, detenido hace dos años en el puerto de Acapulco, Guerrero, solicitó a la jueza el cambio de la prisión preventiva por nuevas medidas cautelares consistentes en residir en un lugar determinado y acudir al juzgado correspondiente de manera periódica para garantizar su presentación al proceso penal que se le sigue por su presunta responsabilidad en el delito de tortura.
Sin embargo, en audiencia de revisión de medidas cautelares, la juzgadora rechazó la petición del exmandatario y dio la razón a los fiscales de la Fiscalía General de la República (FGR) de que llevar su proceso en libertad representaría un riesgo para la víctima y testigos que lo acusan.
En la diligencia, los ministerios públicos, de la Fiscalía Especializada de Control Regional (FECOR), en su delegación de Quintana Roo y de la FEADLE, perteneciente a la Fiscalía Especializada en Materia de Derechos Humanos (FEMDH), presentaron pruebas y argumentos de por qué el exmandatario debe seguir en prisió n preventiva.